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La escuela de verano de Mojácar ya se encuentra en pleno rendimiento, abriendo sus puertas en este mes de julio y hasta finales de agosto y acogiendo a los alumnos que, durante la jornada laboral de sus padres, pueden disfrutar de múltiples actividades.
La escuela de verano es un servicio que ofrece el Ayuntamiento de Mojácar junto con la Diputación Provincial de Almería para que los padres puedan conciliar la vida laboral con la familiar. Es un servicio muy demandado, ya que Mojácar, al ser un municipio turístico, es precisamente en la época estival cuando muchos padres aprovechan para trabajar.
Por otra parte, ofrece a los más pequeños un verano divertido, interactuando con otros niños y realizando actividades lúdicas y educativas.
La escuela está abierta desde las 8,00H. de la mañana hasta las 14,00H. En este mes de julio, 90 alumnos ya se han sumado a esta iniciativa.
Los padres que quieran incluir a sus hijos en esta actividad, aún están a tiempo para apuntar a sus hijos durante el mes de agosto.
Para este verano de 2022, el Ayuntamiento de Mojácar, a través de su Concejalía de Educación, ha realizado un proyecto especial que ha sido muy bien recibido por padres y alumnos.
A lo largo de estos dos meses se va a trabajar por semanas temáticas en las cuales, los niños, interactuarán jugando, aprendiendo y conociendo temas de actualidad adaptadas a su edad y a sus inquietudes.
Además del apoyo a los padres trabajadores, los objetivos cara a los jóvenes siguen siendo los mismos: ofrecer alternativas al tiempo libre en el periodo veraniego, potenciar y promover actividades compatibles que supongan un desarrollo educativo, inculcando valores saludables dentro de la convivencia.
Raquel Belmonte, Concejal de Cultura, ha resaltado “la alegría e ilusión con que siempre comienzan los alumnos esta nueva aventura veraniega”.
Este año, en la escuela de verano, siete monitores se encargan de las actividades. El colegio pierde un poco la seriedad del curso y las aulas se transforman en talleres, salas de música, de pintura y de intercambio de ideas que se complementan con recreos en los que el patio se convierte en fiestas de agua.
